Creo porque él me hizo creer.

Cada vez que me miraba al espejo hace un mes me veía tan diferente, que me daba miedo. Había consumado ser lo que soñaba ser ¿Para qué? Fue divertido, fue bueno, sí. Pero como cosa rara no encontré felicidad total en ello, no encontraba una emoción que me moviera el mundo además del miedo constante.

Hoy me vuelvo a ver al espejo y efectivamente también veo a una Wanda abismalmente diferente. Pero la diferencia radica en que esta está más feliz, viviendo de una ilusión que aun no puede ver materializada pero que el sólo hecho de soñarla le llena la vida, le hace sentir mariposas en el estómago, le hace creer en ella y en que puede ser buena: buena estudiante, buena novia, buena mujer.

Él sabe que lo quiero pero seguramente no alcanza a dimensionar lo que significa para mí. Esa sola ilusión que hoy me regala me ha salvado de hundirme en un mundo de mierda del que no quería salir porque no veía salida. Y mas que quererme y divertirme, me enseña. Él logró derretir el témpano de hielo y encontró una mujer real, sensible, dulce y que cree, sobre todo eso, cree. Cree porque él la hizo creer. 

Yo sé que no lo merezco, sé que con todo lo que he pensado, lo que hecho y dicho, lo menos que me merezco en mi vida es un ser humano tan completo que llene cada uno de mis días de esta felicidad que me brota por los poros, pero el hecho de que no lo merezca no significa que lo dejare ir, solo eleva el compromiso que tengo con él y con la vida.

Pero aun sigo teniendo miedo, esta vez miedo a la felicidad extrema, a que algo, alguien, algún evento desafortunado me arrebate esta felicidad. Y el miedo crece al no lograr encontrarle un defecto, es tan perfecto que sus defectos sólo son físicos.

Había olvidado lo bonito que era sentirme así  querida, sentir que de verdad le importas a alguien y que a pesar de lo que diga el mundo sí te puede ir bien y sí se puede ser feliz, a tu manera, pero se puede.

Sólo me quedan darte gracias y te quieros infinitos, porque te los mereces, eso y mucho más. Te quiero y nos quiero.