Un día normal, de estos de vacaciones, tirada en la cama,
consumida por el aburrimiento y el calor, estaba pensando que hay tantas cosas
de mí y de mi vida que antes odiaba, que no toleraba o no apreciaba. Y que
ahora a través de ti he aprendido a ver con otros ojos.
...Otra de esas cosas grandiosas que le has aportado a mi
vida.
Empecemos por las cosas "pequeñas", para que lo
entiendas mejor. Tu pasión por el fútbol. Simplemente antes de ti no podría
haberme imaginado pasando un domingo viendo partidos, o yendo al estadio a
apoyar a un equipo, o compartiendo esa misma alegría de alguien al relatarme un
partido que jugó, con una emoción igual que si fuera uno de los grandes equipos
del mundo.
También, tu amabilidad es contagiosa, no logro explotarla a
tu mismo nivel, claro. Pero no puedo negar que ha influido en mí, en darme
cuenta que es una manera más fácil y más bonita de conseguir lo que uno
quiere, entender que cualquiera se merece una sonrisa, sentir el poder que
tiene de hacerme a mí y a los demás el día mas feliz.
Y por último, lo que considero más significativo.
Contagiarme ese amor que tienes por mi ciudad y mi cultura, es algo que aprecio
muchísimo. No es que no las quisiera, es que no las valoraba.
Lo importante no es el hecho de que ahora haga
estas cosas, lo que realmente me gusta es que además de hacerlas, disfruto de
ello. Así que por todo esto, también, gracias.
Amo la manera en que a través de ti, amo lo que no
amaba.
Comentarios
Publicar un comentario